La gorda de mierda

Hay pocas cosas que recuerde tan claramente como la primera vez que me dijeron gorda. Tenia alrededor de doce años. Pesaba un poco más de lo que peso hoy con diecisiete años, sufría un sobrepeso leve que no podía ver o al menos no me interesaba. Cuestión, estaba comiendo *como siempre* con mis papas. Quería ponerle a mi hamburguesa un poco de mayonesa y fue ahí cuando escuche a papa decirme 'La mayonesa engorda Mariana, no le pongas, ya estas muy gorda'. Muy gorda. Muy. Nunca nadie me había lastimado de semejante manera. Si bien, en mi colegio la mayor parte del tiempo sufría bullyng nadie me había hecho sentir tan miserable, gorda y fea en mi vida. De ahí en mas mi vida se fue desmoronando, y es que la vida de la gorda no es fácil. Yo con 12 años tenia que usar ropa de alguien de 20. Mientras mis amigas se ponían shorts y remeritas ajustadas yo tenia que ponerme un vestido talle cortina para disimular. Mientras mis amigas se trepaban a los arboles yo las tenia que ver sentada, desde abajo, porque claro, la gorda no podía mantenerse en una árbol. Lo mismo con saltar la soga, tirarse desde una pileta, saltar en la cama, entre otras cosas. Hoy en día sigo sintiéndome esa nena de 12 años, gorda y miserable. Y es que hasta aveces siento que si no soy flaca no puedo triunfar en la vida. La vida de miles de jovenes, mi vida, gira en torno a un peso, a un numerito, a un cambio. Toda la vida y todo el tiempo le hecho la culpa a mi panza, mis rollos, el numerito en la balanza. Me veo al espejo y hago un esfuerzo sobrehumano para buscarme algo positivo pero en mi cabeza solo aparece una vocesita que dice 'con siete menos serias una diosa'. La realidad es que todos los días me miro al espejo, todos. Deseo otro cuerpo mas de lo que alguna vez desee algo. Me paso en una pagina llamada weheartit viendo fotos de chicas delgadas imaginando mi cara en esos cuerpos perfectos, con vidas perfectas, con miles de hombres a sus pies. Las miro y me miro. Mis cejas despeinadas, mi panza de mil kilos, mi nariz excesivamente grande, mis piernas gordas, mis caderas mas anchas de lo que deberían, Estoy obsesionada, quizás. Pero es que siento que si realmente no cumplo mi objetivo nunca voy a terminar de quererme y nadie nunca jamas me va a querer como realmente lo merezco. Solo espero que quizas y tal vez, solo tal vez, un día pueda mirarme al espejo y darme cuenta de que me gusto lo suficiente como para ser feliz, y finalmente dejar de ser esta gorda que no es cualquier gorda, si no, una de mierda.

Y siempre que no aguanto más, escucho esta canción, y de alguna forma, sobrevivo.